Estados Unidos se prepara para la guerra.
WASHINGTON.- Mas allá de que la comunidad internacional no está de acuerdo en llevar adelante una guerra abierta contra Irak, donde los europeos tienen inversiones en la explotación petrolera, el Presidente de los Estados Unidos, George Bush quiere llegar deliberadamente a un final bélico. Bagdad aceptó la presencia de los observadores internacionales de las Naciones Unidas que llegarán en unos días.
El Congreso de la máxima potencia mundial ya le dio el visto bueno al titular de la Casa Blanca para que desarrolle una acción bélica de gran escala, con la clara intención de completar la tarea inconclusa de su padre un poco más de una década atrás.
Rusia y Francia son los países del Viejo Continente que se oponen a los planes norteamericanos, que hasta han ofrecido u$s 10.000 millones a Turquía para usarla de base aérea para el aterrizaje de sus naves de combate. Israel también podría formar parte de la alianza.
En Bagdad, la población teme un ataque contra la población civil, que viene sufriendo las consecuencias del bloqueo en materia de medicinas y tecnología básica. Sadam Hussein, Presidente de Irak, dijo que Estados Unidos quiere el petróleo, que es la máxima riqueza de la región. El titular del Fondo Monetario Internacional, dijo que una guerra le haría muy bien a la economía estadounidense.
Septiembre 2002-09-21 ©