TV en Línea homHome
Por Raúl Asambloc
LA
PAZ.- En una jornada consideraba normal por los observadores internacionales
de la Organización de Estados Americanos y el Mercosur (a pesar de
algunos incidentes en la zona separatista de Santa Cruz) los ciudadanos
bolivianos ratificaron ampliamente al Presidente Evo Morales Ayma, quien
obtuvo casi 400 mil votos más que hace tres años, con el 62
% de los sufragios positivos. Aunque los datos oficiales se sabrán
recién la semana que viene, se habría ratificado a los Prefectos
de Santa Cruz, Beni, Tarija y Pando y estarían siendo revocados los
de La Paz, Cochabamba y Oruro. En su discurso desde el Palacio Quemado,
Morales prometió profundizar el mandato del pueblo boliviano.
La elección revocatoria está amparada tanto en la actual Constitución
como en la flamante Constitución Política del Estado que acaba
de sancionar la Asamblea Constituyente y ante una situación especial,
los que tienen puestos ejecutivos deben ser capaces de repetir el apoyo
obtenido al momento de ser elegidos. Por lo menos, el voto negativo no debe
ser superior en porcentaje al que lo ubicó en el poder. En el caso
de Evo Morales, la acción opositora de los gobernadores
(prefectos) de la denominada media luna pretendió desestabilizarlo
para impedir el proceso de reformas revolucionarias que está logrando
en solo tres años de gestión. Las exportaciones se multiplicaron
por tres, se nacionalizó la energía y la misma se está
extendiendo para el uso doméstico, y en apenas tres años será
el tercer país en América en ser considerado libre de analfabetismo
(junto a Cuba y Venezuela) gracias a los planes de alfabetización.
La salud y el bono a la ancianidad (jubilación) eran herramientas
desconocidas en Bolivia, que se ha extendido con las regalías que
ahora obtiene el Estado por la renegociación de las ganancias energéticas,
que antes eran aprovechadas por apenas una élite a sueldo de las
empresas extranjeras. Incluso casi dos millones de niños estudiantes
en los primeros cinco años de escolaridad, han recibido el Bono Juancito
Pinto, equivalente a 250 pesos bolivianos.
Los cruceñistas de Rubén Costas (que se han destacado por
el racismo que supieron mostrar todos los noticieros de televisión)
lograron mantener a su Prefecto en Santa Cruz, al igual que Ernesto Suárez
de Beni, Mario Cossio de Tarija y aparentemente Leopoldo Fernández
de Pando, todos opositores.
Quienes estarían perdiendo su espacio son el oficialista prefecto
de Oruro y los opositores José Luis Paredes de La Paz y Manfred Reyes
Villa de Cochabamba (quien dijo que va a desconocer los resultados).
Dado que la vieja Constitución no lo ampara, los bolivianos residentes
en Argentina (2 millones de personas) votaron simbólicamente en 23
centros repartidos en la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense.
En el recuente final, hecho en el sur del barrio de Flores, el Presidente
Evo Morales ganó con el 85 % de los votos.
Agosto 2008-08-10
NOVO MundusNET Televisión
Permitida su reproducción con mención de la fuente.