|
|
BUENOS
AIRES.- Con diversas evaluaciones terminó el viaje presidencial a
Estados Unidos, donde no se entrevistó con las autoridades políticas
norteamericanas sino con el empresariado. Acompañado por su esposa,
la Senadora nacional Cristina Fernández, Néstor Kirchner se
movió a sus anchas en entrevistas concertadas por sectores. Los mas
permeables a anunciar sus buenas intenciones fueron los gerentes del área
de tecnología.
El explosivo crecimiento de la telefonía celular y los diversos accesos
a internet, mas la fuerte inclinación de los argentinos hacia la
web, hacen mas que prometedor el panorama para los desarrolladores de software.
En la mayoría de los numerosos encuentros, el ánimo fue de
moderado optimismo ante la aparentemente sólida recuperación
económica de la Argentina, aunque muchos plantearon sus temores ante
la resolución de la crisis energética. En una de esas explicaciones
el mandatario dejó traslucir que había sido extorsionado por
una empresa petrolera (que todos dedujeron era Repsol) y generó un
escándalo en Buenos Aires que obligó a la postergación
de la audiencia pública para el aumento de tarifas en servicios
de energía. A pesar de ello, le quitó dramatismo a la actual
crisis coyuntural, que se solucionará con un amplio plan que se lanzará
en la segunda semana de mayo donde se contempla la posibilidad de crear
una empresa de energía nacional que ingresará en todos los
campos (gas, luz, petróleo y minería).
La figura de la Senadora Fernández tomó importantes dimensiones
a raíz de la amplia cobertura que sobre ella prestó la prensa
local, donde obtuvo un importante reportaje de la CNN en Español
y del The Washington Post. Mucho mas enérgica que su esposo en las
declaraciones que tuvo ante los periodistas, dijo que "se ha hecho
mucho pero es más todavía lo que falta".
Mayo 2004-05-09 ©