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Anuario.
EL TEMA
DEL AÑO
Francia roba niños en el tercer mundo.
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2000-2008
CORDOBA.- El ex Teniente Coronel Paul Alberto Navone apareció en
la habitación de su hotel en Córdoba con un disparo en la
sien, que le provocó la muerte inmediata. A los pocos días
iba a declarar por el secuestro y robo de bebés durante el gobierno
militar. Preocupación por otra muerte que se está convirtiendo
en algo recurrente con los ex uniformados que dicen o se cree que saben
bastante sobre los mecanismos represivos del gobierno de facto.
En el marco de los Juicios por la Verdad, había manifestado su voluntad
de declarar a pesar de que había comenzado a recibir amenazas contra
su familia. El abogado de oficio designado un día antes de su muerte,
el Dr. Justiniano Martínez dió a conocer una carta que le
habría dejado a sus parientes pidiéndoles perdón por
la decisión. La misiva está sometida a un peritaje caligráfico
para determinar la autoría de la misma.
Tras el traslado del cuerpo desde el Hotel Militar cordobés hasta
la morgue, se le realizó una prueba de dermotest, para determinar
si empuñó el arma que le provocó la muerte. La jueza
de Paraná Myriam Galizzi cree que en principio no habría motivos
para creer que no fue un suicidio.
Los organismos de Derechos Humanos le manifestaron a la Presidenta Cristina
Fernández la preocupación por la cantidad de militares y testigos
que en los últimos años aparecen suicidados o
desaparecen. Hay una firma hipótesis que hablaría de una organización
secreta dentro de las fuerzas armadas que amedrenta a todos los ex uniformados
que deseen abrir el velo de misterio que esconde aún el aparato represor
instaurado durante las dictaduras de Videla, Viola, Galtieri y Bignone.
Marzo 2008-03-01
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