BRASILIA.-
La visita de la Presidenta argentina Cristina Fernández a Brasil
no fue una visita más sino el preludio de las próximas acciones
internacionales que debe emprender con su par de Brasil, Luiz Ignacio Lula
Da Silva. La próxima cumbre del G-20 y la Cumbre de las Américas
estuvieron en las conversaciones entre ambos mandatarios.
A pesar del cruce de declaraciones entre los empresarios paulistas y la
CGT argentina en cuanto a las políticas que cada país toma
para proteger a sus empresas primaron los oficios diplomáticos para
que ambas naciones aúnen posiciones. Cristina Fernández dijo
que a pesar de las diferentes posturas no quiebra el espíritu de
hermandad entre ambas naciones integrantes del Mercosur. La referencia es
en relación a que en la próxima cumbre de las principales
economías del mundo (G-20) que se realizará en Londres, Buenos
Aires pedirá la modificación total de las funciones del Fondo
Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) y la libertad de cada
país de proteger sus mercados internos y el empleo. Lula, por otro
lado, está muy presionado por los barones de la industria paulista
que le controlan el Senado y lo extorsionan. Por ello le reclaman que su
discurso sea la apertura de mercados, con obvios beneficios para las economía
de escala (de países grandes) que favorece a las principales economías.
Brasil es la octava potencia económica del mundo.
El tema Obama y sus intenciones de re-incorporar a Estados Unidos al concierto
continental de naciones también estuvo en las principales líneas
de acuerdo entre la Cancillería argentina y el Itamaraty brasileño.
Ambos presidentes mantienen corrientes de cortesía con el primer
mandatario negro de una nación históricamente racista. Aquí
sí el acuerdo fue reclamarle que Whasington mejore sus relaciones
con Cuba y Venezuela, en el que la próxima Cumbre de las Américas
en Trinidad y Tobago sería la oportunidad de la gran presentación
en sociedad.
MARZO 2009-03-21
TECUM NOVO MundusNET Televisión
Permitida su reproducción con mención de la fuente.